sábado, 4 de octubre de 2014

Reseña: Tokyo Ghoul

En Tokyo ocurren asesinatos misteriosos cometidos por Ghouls, seres desconocidos que comen carne humana. Un día, Kaneki Ken, un joven de 18 años que va a la universidad, conoce a una chica en un restaurante y la invita a salir. Tras una cita aparentemente agradable, Kaneki se ofrece a llevarla a su casa. Sin embargo, al entrar a un callejón, es atacado por la chica, que resulta ser un Ghoul. Durante el ataque, Kaneki es salvado por unas vigas que matan a la ghoul antes de que pueda matarlo, pero dejándolo terriblemente malherido. Debido a la gravedad de sus heridas, recibe un trasplante de órganos de emergencia de la chica muerta por desconocimiento de los médicos de la identidad de Ghoul de la muchacha. Kaneki termina convirtiéndose en un ser híbrido humano-ghoul y de ahora en adelante deberá vivir escondiéndose de los humanos.


Alguna vez en nuestra vida cualquiera de nosotros hemos tenido una primera cita que no esperábamos que terminara como pensábamos—para bien o para mal—, pero nunca habremos tenido tanta mala suerte como Kaneki, el protagonista de este anime que nos ha traído el estudio Pierrot (Bleach, Naruto...), Tokyo Ghoul, esta pasada temporada de verano.


En esta historia estaremos en la piel de Kaneki Ken, un chico normal que va a la universidad y aficionado de la lectura desde que era pequeño. Además, es muy tímido y reservado, y tiene el problema de confiar muy rápido en los demás, por lo cual esto hace que se meta más de una vez en algún lío, como podemos contemplar nada más empezar el anime. Un día, a pesar de su timidez, Kaneki consigue quedar por primera vez con Rize, una chica que, según él, tiene sus mismos gustos. La cita transcurre sin problemas pero, en el momento de la despedida, aquella chica tan tímida y mona con la que había quedado resulta que es un Ghoul, una especie de demonio cuyo modo de supervivencia es devorar humanos.

Sin embargo, por un momento la suerte le sonríe a Kaneki y no muere gracias a esta ghoul, pero acaba siendo aplastado junto a ella por una viga que caía desde el cielo. La ghoul muere, pero de urgencia a Kaneki le son trasplantados sin conocimiento por parte de los médicos los órganos de Rize, dando lugar a un infierno en la vida de Kaneki pues, de un momento a otro, se ha convertido en mitad humano, mitad ghoul.


A partir de este momento Kaneki tendrá que enfretarse a un sinfín de problemas que le harán la vida más que imposible. En primer lugar, no ser descubierto como un ghoul, ocultando toda su ansia de llenarse el estómago entre toda la comida humana, y más aún frente a su gran amigo de la infancia Hide, ya que al convertirse en un demonio, cualquier alimento humano le será repulsivo —exceptuando el café—. Además, no solo el hambre le hará pasar malos momentos, sino que también se tendrá que enfrentar a los propios ghouls por simple supervivencia y, por otro lado, a los Investigadores de Ghouls, una organización cuyo fin es eliminar a cualquier ghoul que ande por la ciudad mediante unas peculiares armas llamadas quinques, formadas por los kagunes, el poder oculto que tienen los ghouls. Y bueno, este es solo el principio de lo que le esperará a este pobre chico, aunque no estará solo, pues en el fondo de todo este meollo le ayudarán unos ghouls, los del Café Anteiku, para que su vida sea un poco más tranquila y llevadera a pesar de todo.

En relación a los personajes, además de Kaneki tendremos un gran elenco de humanos y de ghouls que aparecerán en el transcurso del anime. Por un lado, entre los personajes humanos más importantes tendremos a Hide, que, como ya se ha dicho, es el amigo de la infancia de Kaneki y el más cercano en cuanto a los humanos se refiere; y a los investigadores, siendo los más importantes Amon y Mado, que darán su vida con el fin de erradicar a los ghouls de la ciudad. Y, por otro lado, estarán los ghouls, siendo los más importanes aquellos del Café Anteiku, destacando Touka, la mayor responsable de salvar a Kaneki de cualquier amenaza; y Rize, la culpable de la metamorfosis de Kaneki hacia ghoul, cuya alma estará dentro de Kaneki, siendo esta su parte demonio que le hará delirar y enfurecer. Cada uno tendrá su historia y sus porqués, que se irán viendo poco a poco en el desarrollo del anime, todo ello con una buena ambientación tanto en ellos como en los ambientes, que cambiará de una forma un otra en los momentos más importantes. En lo que respecta a su banda sonora, su opening es unravel, por TK de Ling Tosite Sigure; y su ending es Saints, interpretado por People In The Box.


Dejando todos estos detalles de la trama a un lado, y para terminar, ya que no es plan de que os cuente todo sin apenas verlo (si no lo habéis visto), tengo que decir que nada más transcurrir los primeros 20 segundos Tokyo Ghoul me sorprendió gratamente. Sin embargo, tras ver todos los capítulos y ver el desarrollo y los detalles técnicos de la historia, no me llenó tanto como esperaba, ya que mis espectativas eran muy distintas a lo que al final ha acabado siendo. La censura, predominante en prácticamente todos los capítulos, y la mala adaptación del manga original han sido los factores más importantes para no concederle a este anime una gran nota. Se han dejado atrás mucha información del manga, imprescindible para conocer mucho mejor a cada personaje y las transformaciones de los mismos. Los hechos se suceden muy rápidamente, y a veces es normal encontrar situaciones que no sabes muy bién de quién ni de dónde han salido.

Por ahora, solo nos quedan las esperanzas en la próxima temporada del anime (que saldrá en enero del año que viene) para ver si hay algún cambio destacable en la adaptación del manga y, obviamente, ver las consecuencias del cambio del protagonista y dar un final digno a la historia.

Nota: 6,5/10

FICHA TÉCNICA
Nombre: Tokyo Ghoul (東京喰種:トーキョーグール)
Género: Horror, Thriller, Gore, Drama
Estudio: Pierrot
Dirección: Shuhei Morita
Guion: Chuuji Mikasano.  Basado en el manga de Sui Ishida.
Emisión: 2014
Capítulos: 12
Licenciado en España por Selecta Visión