jueves, 8 de noviembre de 2018

Análisis: My Hero One's Justice


Hablar de videojuegos de peleas es siempre una tarea algo complicada. Son la clase de juegos que, por lo general, necesitan ser exigentes en sus mecánicas para convencer a los más expertos del género. Pero esto no siempre ha sido la norma. Desde hace muchos años existen videojuegos de un corte menos exigente que lo único que necesitan para lograr el éxito es conseguir ser sumamente divertidos y tener una base de contenido suficiente para encandilar de buena gana a los jugadores. Este es el caso que nos atañe hoy con My Hero One's Justice.

El grupo de héroes y villanos más carismáticos del momento llegan a la presente generación de consolas llegados de la mano de Byking Inc. y Bandai Namco. Hoy te relatamos en estas líneas que tal ha funcionado el nuevo videojuego basado en el popular anime My Hero Academia, en su versión para PlayStation 4.


En esta ocasión estamos ante el típico Fighter Arena, un gran subgénero que se especializa en dotar al jugador con la libertad de recorrer los escenarios cerrados para aprovechar la mayor maniobrabilidad combativa y defensiva posible en los épicos combates uno contra uno que se darán. Aunque no estaremos solos en la batalla, pues siempre podemos obtener la inestimable ayuda de un par de personajes de apoyo que nos darán más juego táctico a nuestras partidas.

A decir verdad cuando entré de nuevas con este título me topé con una jugabilidad algo superflua y no demasiado compleja, lo que en mi primera impresión no fue muy buena pues estoy acostumbrado a juegos de pelea algo más tácticos. Sin embargo eso solo fue una primera y muy vaga impresión. Conforme iba jugando más y más me iba enganchando muchísimo a la premisa.


Este título por defecto tiene los controles asignados para el jugador que juega de manera casual y que quiere jugar más livianamente sin la necesidad de lastrar su tiempo de diversión aprendiendo a jugar, por lo que la disponibilidad de realizar combos era algo baja con este tipo de control a la par que era la más sencilla para jugar. No obstante el juego te deja cambiar el control al modo manual, lo que te da cierta libertad para combinar más tipos de movimientos, opción que para alguien como yo se ajustaba más.

Una vez con el tipo de control cambiado más a mí manera de ser, descubrí que My Hero One's Justice si bien sigue sin ser un juego de lucha demasiado complejo para los más veteranos, si ofrece lo suficiente para divertirse e incluso crear tácticas de lo más variopintas.

Disponemos de un doble salto, la habilidad de correr tanto en el suelo como impulsarnos por el aire, un combo de ataques débiles, escudo y un par de habilidades especiales algo más fuertes. Este corto set de movimientos se puede combinar de diferentes maneras en la batalla para sacar ventajas usando la pericia del jugador. Cuando estamos en peligro si combinamos un movimiento direccional del joystick más uno de nuestros ataques cargaremos un contraataque poderoso que mandará al rival a volar o a estrellarse contra una pared. Un movimiento muy útil para sorprender al enemigo y darle la vuelta al combate.


Aparte de esto, la mayoría de habilidades especiales funcionan de diferente manera tanto en el suelo como en el aire, lo que te da una variante de habilidades que se ajustan a diferentes momentos del combate. Proponiendo ejemplos, Shoto Todoroki tiene el magistral don de combinar el fuego y el hielo. En tierra suele golpear con el hielo, mientras que en el aire genera sendos ataques flamígeros. Cada golpe hace un daño mayor o menor que otro y toma diferentes ventajas y contras distintas, así que hay que pensar un poco en qué momento requiere utilizar mejor cada tipo de ataque. Si vamos por el aire solemos estar más expuestos por ejemplo, así que todo depende de ajustarnos al momento que requiere la situación.

Si tienes la suerte de estrellar al contrincante y dejarlo atrapado en una pared, la fuerza de la gravedad se invierte para que puedas andar por las paredes y aprovecharte para darle rienda suelta con nuestros golpes más poderosos al pobre contrario, que ha tenido la mala suerte de estar a nuestra merced.


Como es común en este tipo títulos, también tenemos los ataques favoritos de todo aficionado del género, los súper especiales. Aquí denominados como los Plus Ultra, gastarán una, dos y hasta tres barras de energía a la par que el daño que hace es mucho mayor. Al menos si sabes hacerlos conectar, pues el ataque no surtirá efecto si no consigues que acierten. Y ya avisamos que estos golpes a veces no son fáciles de atinar, pues cada uno tiene un rango diferente de acción dependiendo del personaje utilizado.

A la mínima que seas un poco avispado podrás desatar el daño más brutal si combinas estos Plus Ultra en el momento adecuado de un combo o tras alguna táctica con los personajes de apoyo. Porque sí, los ayudantes no están ahí tan solo para golpear solamente cuando los invocas al rellenar su barra, sino que cada uno cumple una acción diferente y bien aprovechada te servirá para escapar de una encerrona en una pared o para atontar por un levísimo período al oponente.


Sin ser algo realmente complejo, encontramos unas muy buenas bases de juego que funcionan realmente bien si el jugador sabe aprovecharlo, pero sobre todo si se adentra más en el modo manual. Las mecánicas que nos ofrece My Hero One's Justice no están nada mal, pero ¿es todo lo que nos ofrece este título? Bueno, como bien dije en las primeras líneas, estamos ante un videojuego con contenido.


El título cuenta con un modo historia basado en la popular serie de televisión, un modo misiones con retos especiales, un multijugador local para jugar contra la CPU o un amigo, el modo entrenamiento para probar ideas y aprender, el multijugador online donde lucharemos por diversión o por competividad, una personalización de personajes para cambiar nuestro look, la personalización del perfil para hacer vistosa nuestra carta de presentación en el modo en línea, una galería para ver o escuchar contenido desbloqueable, los ajustes para modificar parámetros y por último una suerte de modo arcade obtenible con la actualización de día uno —una modalidad que nuestros amigos japoneses no tuvieron de inicio cuando se estrenó el juego hace meses en el país del sol naciente—.


Pasando a detallar un poco, en el modo historia nos relatan los sucesos del anime a partir de la segunda mitad de la segunda temporada de televisión hasta el final de la tercera temporada al completo. Cada capítulo es contado con introducciones estáticas con recortes del anime y distribuidas en viñetas con una suerte de onomatopeyas para asemejarse así a un cómic. Una manera simplista de contar la historia pero efectiva. También veremos en muy poquitas ocasiones —tan solo tres— alguna cinemática para ponernos a tono en los momentos importantes de la trama. Tras las introducciones, entramos a combatir contra los diferentes personajes que conforman la serie. Tanto héroes como villanos nos retarán por diversos motivos, por lo que nuestro objetivo será ganar sin darles cuartel.


Nuestra motivación para combatir no queda ahí. El videojuego nos ofrece en esta modalidad dos retos opcionales a cumplir por cada combate además de el de acabar victoriosos. Uno de ellos es acabar con rango S, un rango que el rival no siempre nos lo dejará fácil de conseguir pues se obtiene cumpliendo una serie de parámetros dentro del combate que tendremos que aprender a combinar para obtener los mayor puntos posibles. El otro reto es el secreto. Una tarea a cumplir que a priori no sabremos como obtenerla a menos que probemos todo tipo de cosas. Pueden ser desde ganar en 30 segundos, ganar habiendo usado al menos 3 veces a los ayudantes, acabar con un especial de nivel 3, entre otras tareas menos fáciles de predecir.

Al acabar un combate desbloquearemos accesorios o trajes alternativos para personalizar a los luchadores. Y si cumplimos las dos retos opcionales de cada combate obtendremos otro par más de prendas o accesorios, además de dinero para comprar aún más cosas en la tienda que hay en el modo de personalización de personajes. Lo que antoja siempre una sensación de progresión continua para el jugador, que siempre querrá conseguirlo todo.


Tras acabar la historia se desbloqueará el modo historia de los villanos, donde veremos nuevas conversaciones de la historia y nos haremos con su rol, pasando a ser nosotros los villanos combatiendo contra los buenos. Y una vez cumplido esto, obtendremos de manera sorpresiva la primera parte de la segunda temporada.


No sabemos porqué motivo empezamos desde la mitad de la segunda temporada y luego al final de todo nos dejan desbloquear la primera mitad de esta. Nos encanta que haya tanto contenido en su modo historia —nada menos que 64 combates más sus dos retos opcionales en cada uno— pero vuelve algo liosa la historia que se intenta contar. Al menos es así para las personas que jueguen sin conocer la serie. De hecho, el videojuego se salta completamente la primera temporada dejándola sin contar, empeorando aún más la entrada de jugadores desconocedores de la serie. Y sobretodo, del contexto principal del lazo que hay entre el protagonista, Izuku Midoriya, y su mentor All Might. En ese sentido, un enfoque algo mal planteado, a decir verdad.

Dejando a un lado el modo historia, tenemos el modo misiones, una serie consecutiva y muy numerosa de combates con reglas especiales que tendremos que tener muy en cuenta para no desfallecer. Estas reglas pasan por cosas tales como tener un ataque menos poderoso en los golpes especiales, a hacer mas daño si tiene menos vida que el contrario, entre otras más. Con ello tendremos como objetivo conseguir todos los Rango S y superar los records estipulados para conseguir más dinero y desbloqueables.


Es un modo que se hace más difícil que el modo historia conforme vas avanzando en los seis mapas ofrecidos, pero es un reto la mar de divertido que completar. La dificultad va escalando conforme aceptas mapas de mayor rango de estrellas, el medido usado para escalar la dificultad en esta modalidad de juego.


Por último en este mismo modo hay un séptimo mapa que escala de forma más abrupta la dificultad mientras suceden los combates: es el denominado mapa de ataque por puntos. En esta sección los puntos finales que consigamos son comparados con la de los jugadores en línea. No tiene más finalidad que la de que intentes subir y aguantar más en el ranking que otros jugadores, pero si eres de a los que les gusta competir, te va a costar mucho proteger tu puesto contra el resto de jugadores.


El modo multijugador local no deja de ser lo que es, una modalidad en la que combatir con algunos amigos o hermanos con todos los personajes del plantel que poseas. Un plantel bastante variado y atrayente de personajes y estilos de combate, pero que se queda un poco cojo en representación de grandes caras del anime que se han quedado fuera. Es una pena que no podamos contar con la graciosa Mina Ashido, el pervertido Mineta Minoru y algunos profesores, alumnos y villanos más. 

Los escenarios de combate constan de tan solo doce arenas, tres de las cuales con la particularidad de tener derrota instantánea por salida del ring, algo que le da un extra de emoción al combatir en ellas. Estas se pueden antojar pocas pero sin duda son bastante variadas entre sí. 

En el modo entrenamiento nos dejarán ajustar el llenado de las barras de energía y si la CPU ataca o hace de sparring para practicar jugadas, algo que querremos sin duda probar de vez en cuando antes de enfrentar a nuestros amigos en el multijugador local o... sí, el multijugador en línea.


Esta modalidad es sin duda la más atrayente para mucho del público que tiene dificultades para jugar en local con sus amistades o que disfruta de la competitividad y de los rankings mundiales. Dentro encontraremos solo dos opciones de juego: partidas no clasificatorias y partidas clasificatorias. Si pretendes jugar por diversión sin entrar en ranking de ningún tipo, la primera opción es la mejor elección; pero si buscas competencia que busca darlo todo por el bien de superar a otros, la segunda opción será lo suyo.


He de decir que me he encontrado un poco de todo, tanto partidas con un lag aberrante como partidas muy fluidas. Por suerte, las últimas han sido más numerosas. Como cabe imaginar, jugar contra personas es un cambio notoriamente mayor al de jugar contra la CPU pues por norma se dan un mayor número de estrategias que vuelven los combates más épicos de lo que de por sí ya eran.

Al acabar un enfrentamiento puedes votar con un me gusta al otro jugador si te ha gustado el combate que has tenido contra él, aunque si no estás de acuerdo con su forma de jugar, puedes optar por no dar ninguno. Todo a gusto del jugón.


Algo alejados del online, para el jugador más clásico encontramos la modalidad arcade. Si bien es un modo algo ya en desuso en algunos videojuegos de peleas por lo poco llamativo que es hoy en día, se agradece mucho la inclusión de este para ponernos a prueba contra la CPU. Nos abriremos paso entre un pequeño número de combates escalonados hasta llegar al jefe final de turno. Al acabarlo conseguiremos un accesorio exclusivo para el personaje con el que hayamos ganado la contienda. De esta manera, como es la única forma de obtener este accesorio, se nos invitará a rejugar múltiples veces hasta terminar de completarlo con todos los personajes.

Si desbloqueas avatares y lemas podrás personalizar tu perfil de jugador para ponerlo bastante divertido de cara a otros jugadores que te reten en línea. Una carta de presentación curiosa cuanto menos. Si bien, por desgracia, no podemos mezclar trajes de un personaje con el de otro diferentes, pero sí la mayoría de sus accesorios. 

Cabe mencionar que hay nada y nada menos que la locura de más de 300 elementos desbloqueables entre los trajes y los accesorios. En la galería como mencionamos más arriba es el lugar disponible para escuchar la música y voces conseguidas, como ver las escenas de la historia. Pero además de esto veremos los modelados de los personajes en diferentes posiciones divertidas o incluso los 84 bocetos desbloqueables provenientes del equipo de animación del anime. Toda una delicia para los fanáticos.

El apartado técnico y visual con el que cuenta el título es muy poderoso y atrapante con un cell-shading bien utilizado que hace resaltar muchísimo los modelados cartoon de los personajes, los cuales están representados de manera fidedigna tanto físicamente dentro del videojuego como animados. Ver en acción a cada uno de los luchadores es un gozada en casi todos los sentidos.

Cada golpe, fogonazo, explosión o tortazo se siente poderoso al conectar. Los efectos lumínicos acentúan aún más el gozoso apartado visual. Algunas de las arenas de combate pueden lucir algo básicas pero no desentonan demasiado. Sin duda ha habido un gran trabajo en cada uno de los apartados visuales del título. Aparte de ello, los combates se suceden ágiles y frenéticos sin ralentizaciones de fps, lo que conlleva a que convenza aún más la propuesta visual en conjunto y se juegue muy bien.

En el apartado sonoro no se queda tampoco demasiado atrás. Dejando a un lado que cuenta con las estupendísimas voces del audio japonés del anime y que ya ha quedado claro lo fieles que han querido ser con la serie, la música no llega a la alta calidad de lo escuchado en televisión, pero se le acerca un poco. Gratamente podemos decir que el sonido cumple muy bien con un conjunto de melodías rockeras que animan en todo momento a no parar de combatir. Desde la portada del juego a cada uno de sus modos y combates, las melodías están compuestas de manera satisfactoria para que incluso las tararees mientras las escuchas.


Cómo no, los efectos de sonido en un juego de lucha han de ser buenos para lograr sentir del todo la conexión machacadora contra el rival. Los golpes se sienten poderosos no solo en lo visual sino también en lo sonoro. Cada impacto se escucha realmente bien. 

En conclusión, My Hero One's Justice nos ofrece unos combates la mar de ágiles, frenéticos y muy divertidos. Hacernos con el control de cada personaje no suele suponer una tarea que se haga muy cuesta arriba. Tan solo entrenando un poco nos haremos con el tempo de cada luchador y sabremos sacarle jugo a cada uno de sus ataques. Al tener dos tipos de control tanto para novatos como para jugadores algo más veteranos, encontramos en la premisa jugable que nos trae Byking Inc., un buen Fighter Arena para todo tipo de públicos. No convencerá a los que buscan un juego de lucha muy exigente, pero este juego tampoco lo pretende.

No podemos recomendarlo para los jugadores que no han visto de primera mano la serie, pues su modalidad historia se salta eventos cruciales de la primera temporada de la serie para entender parte del contexto que quieren explicar. Pero los fans más acérrimos estarán en su salsa. No solo tienen un juego que representa a My Hero Academia fidedignamente, sino que además los recompensan con multitud de accesorios, trajes y demás contenidos desbloqueables a lo largo de todo el juego. Un videojuego bastante redondo al que no se nos debe olvidar mencionar, cómo no, la inclusión de textos en castellano. Si eres fan, este título te invitará machacar a tus amigos y vecinos al son del Plus Ultra.


Lo mejor:
  • La fiel representación visual y jugable en casi todos sus aspectos.
  • Tanto los escenarios, personajes, animaciones, ataques y demás son una locura visual.
  • Una jugabilidad simplista pero disfrutable por casi cualquiera.
  • El contar con una banda sonora de buena calidad y con el reparto de voces original hace que en lo sonoro nuestras orejas aplaudan.
  • La gran cantidad de contenidos desbloqueables te llevarán muchas horas de juego por delante.
Lo peor:
  • La falta total de la primera temporada del anime en su modo historia lo convierte en poco recomendable para personas que no han visto/leído nada de la serie.
  • Las pocas cinemáticas que tiene están muy poco trabajadas.
  • Cuando caminas el movimiento del personaje es demasiado lento, por lo que no convence demasiado soltar casi núnca el botón de correr.
  • Aunque bastantes y variados, se echan en falta algunos personajes más
  • Se antojan más bien pocos los escenarios.
Nota: 8/10.

Análisis realizado por José Ignacio Rodrigo Torres (versión de PlayStation 4). Copia facilitada por Bandai Namco.
FICHA TÉCNICA
Nombre: My Hero One's Justice
Género: Acción
Desarrollador: Byking Inc.
Distribuidor: Bandai Namco
Jugadores: 1-2
Precio: 69.99€
Formato: PlayStation 4, Xbox One, Nintendo Switch y PC vía Steam
Lanzamiento: 26/10/2018