Los videojuegos son un medio de comunicación capaz de generar por sí solos una serie de significados y sensaciones como ningún otro puede. Pero no todos son capaces de hacer que el receptor, que es el jugador, logre asimilar aquello que nos tratan de hacer sentir. En el caso del último trabajo del estudio MixedBag Games, Forma.8, logra y con creces lo que nos quiere transmitir y ha acabado siendo un juego que es mucho más de lo que aparenta y donde la superación será una constante de cara a salir victoriosos de este extraño planeta alienígena.
Nada es lo que parece
Nuestra aventura en Forma.8 no podría comenzar de una forma más aparatosa. Con una breve cinemática al comienzo, nos muestran cómo una serie de sondas son enviadas a través del espacio con algún rumbo que desconocemos. Si bien, hay una en particular que parece estar envuelta en una serie de problemas que le fuerzan a aterrizar de emergencia en un inhóspito planeta. No nos quedará más remedio que explorarlo con el fin último de salir de allí y, a poder ser, con vida. Nada ni nadie nos dirá nada: estamos solos ante la inmensidad de lo desconocido. El nivel de soledad y la constante exposición al peligro, como si de la batalla de David contra Goliat se tratara, es una de las sensaciones que mejor sabe transmitir la obra de MixedBag y huelga decir que es algo que francamente nos ha maravillado.
Es a partir de aquí donde todo el protagonismo lo tendrá nuestra pequeña sonda que deberemos manejar a lo largo del complejo entramado que conforma este extraño planeta el cual se divide en una serie de habitaciones. Quizás lo primero que salte a la vista, como es normal, es su acertado apartado gráfico que es práctico y precioso: práctico, porque se muestra limpio, sobrio y con los elementos necesarios en pantalla sin llegar a ser especialmente agobiante por sobredosis de decorado; precioso porque se emplea una paleta de color en función de la temática que rodea al habitáculo en el que nos encontremos que funciona a las mil maravillas. Así, viajaremos a través de zonas variopintas y que poseen una transición perfecta entre todas ellas: zonas al aire libre, pantanosas, mecánicas, de volcán…
Pero Forma.8 es mucho más que unos gráficos bonitos. Estamos ante una gran aventura llena de acción y con un marcado carácter Metroidvania donde nos resultará muy útil el mapa al que tendremos acceso al instante a golpe de gatillo, el cual dejará registradas todas aquellas salas por las que hayamos pasado conformando, poco a poco, todo el entramado del misterioso planeta como si de un puzle se tratase. Pero no todo estará visible a nuestros ojos, ya que no serán pocos los pasadizos ocultos que aguardan multitud de secretos como coleccionables en forma de tuercas o unas extrañas piezas de Tetris que debemos encajar en unos altares ocultos que están por ahí desperdigados. Cabe decir que en determinadas y contadas ocasiones hemos notado leves bajadas de frames al entrar en una nueva sala, nada que destroce la experiencia jugable pero una pequeña mancha que ahí queda latente.
Frescor jugable
Dicen que en la variedad está el gusto, y ahí precisamente radica otro de los puntos fuertes de Forma.8. De una manera muy inteligente evita la monotonía jugable ofreciendo variados desafíos, que si bien algunos guardan cierta similitud, siempre ofrecen un matiz distinto. Así, nos toparemos con pruebas con un tiempo límite, desafíos donde la sincronización será vital para superar el puzle, momentos donde tendremos que huir y no mirar atrás… e incluso otros donde hará gala de unas buenas físicas muy bien implementadas. En ningún momento hemos sentido que un puzle sobre o que resulte superfluo. Y esto mismo se traslada en igualdad de condiciones a las peleas contra determinados enemigos que tienen asignados el papel de jefecillo de turno. Estos se sienten frescos y cada uno de ellos representará unos puntos débiles y un ritual completamente distinto para derrotarlo. Lo cierto es que todo tiene sentido en el complejo engranaje que conforma el título lo cual le hace ganar enteros.
En cuanto a su duración, tenemos que decir que al no disponer de un registro de las horas que llevamos en nuestra partida, mostrándonos tan solo un porcentaje del total que llevamos superado, nos cuesta determinar un número de horas incluso aproximado que hemos dedicado en el título para superarlo. Lo que sí os aseguramos es que no se trata de un juego que se pase en una tarde, ya que investigar el complejo entramado que conforma este planeta alienígena y atender a todos sus secretos, ya sean salas ocultas o los distintos coleccionables, nos asegurarán horas y horas de aventura.
Y, por supuesto, todo esto no sería lo mismo sin la banda sonora con la que cuenta. Las piezas musicales le vienen como anillo al dedo a toda la atmósfera que nos tratan de representar ya que nos meterá de lleno en el papel de la sonda perdida y sola ante los peligros que le aguardan. Los variados efectos de sonido con los que se encuentra aderezada, ya sean de enemigos o de elementos del escenario —como puertas al abrirse— no hacen más que sumar positivamente al montante total de la obra. Es por ello que resulta casi obligatorio el uso de auriculares o cascos para ganar ese plus de inmersión y no escapar a ningún detalle sonoro. Y de detalles queríamos hablar: ya que nuestra sonda se muestra viva y tal es así que cuando la dejamos sin tocar ningún control durante un breve tiempo quizás la veamos echarse una siestecita o se pone a bailar dando vueltas sobre sí misma. Sin duda, se nota a leguas el mimo con el que la desarrolladora ha trabajado en esta obra para ofrecernos un producto bien acabado y que supera nuestras expectativas. Ya lo dicen, la grandeza está en los pequeños detalles.
Lo mejor:
- Sensación de soledad y exposición constante ante el peligro.
- Apartado gráfico sensacional con un uso muy inteligente de la paleta de color.
- Viaje lleno de autosuperación y siempre te hacen sentir motivado por querer conocer qué aguarda en la siguiente sala.
- Una banda sonora y unos efectos de sonido que le vienen como anillo al dedo.
- Excelente relación calidad/precio/duración.
Lo peor:
- Leves caídas de frames.
La obra de MixedBag Games se corona como una gran aventura llena de acción y con ese toque Metroidvania que hará las delicias de los fans a buen seguro. Ya, nada más de entrada, nos ofrece un apartado gráfico sensacional que invita a querer visitar el resto de las estancias de este inhóspito planeta. La sensación de soledad y peligro acechándonos a cada esquina por la que viajemos será constante y realmente han sabido cómo trasladar dichas sensaciones al jugador a las mil maravillas. Además, no caerá tan fácilmente en la monotonía jugable ya que rezuma un frescor en los distintos y variados puzles que tendremos que superar para avanzar. Forma.8 es, sin duda, una experiencia que no os debéis perder.
Nota: 8.5/10.
Análisis realizado por Fran del Rosal (Versión PS Vita). Copia facilitada por MixedBag Games.
FICHA TÉCNICA
Nombre: Forma.8
Género: Aventura
Jugadores: 1
Precio: 14.99€
Formato: Descarga digital eShop (WiiU), PS Store (PS4/PS Vita),
Steam (PC), tienda Xbox (Xbox One).
Lanzamiento: 22/02/2017
Género: Aventura
Desarrollador: MixedBag Games
Distribuidor: MixedBag GamesJugadores: 1
Precio: 14.99€
Formato: Descarga digital eShop (WiiU), PS Store (PS4/PS Vita),
Steam (PC), tienda Xbox (Xbox One).
Lanzamiento: 22/02/2017
